Significado De Fe

TABLA DE CONTENIDO

El significado de la palabra ‘fe’ es un tema que ha sido discutido a lo largo de los siglos. Sin embargo, la Biblia nos da una definición cristiana clara de este concepto.

Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve. Hebreos 11:1

En este artículo, vamos a estudiar lo que la Biblia dice acerca del significado de fe, cómo funciona y cómo podemos desarrollar una fe más fuerte.

La fe es la garantía de lo que se espera

La fe sucede en el ahora (no mañana, ni pasado, ni el próximo mes). Es un acto de tomar lo que Dios ha prometido y esperarlo con confianza.

Aún cuando no lo veamos reflejado con nuestro ojos físicos ahora mismo, la fe es saber que en el espíritu, es algo que ya ha pasado.

Por ejemplo, puede ser que no veas la sanación de Dios en tu vida ahora mismo, pero si tienes fe, sabes que él te ha sanado porque su Palabra así lo dice:

Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados. Isaías 53:5

Creencia y expectativa andan de la mano. La fe es tanto una actitud como una acción. No puedes tener una sin la otra. La fe es creer que Dios va a hacer lo que dice en su palabra y esperarlo activamente, diciendo “Dios me ha sanado”, “Por las heridas de Jesús he sido sanado”. Tarde o temprano, la sanidad vendrá a tu vida. Sólo es cuestión de paciencia y de perseverancia para verla manifestada en tu vida.

La fe es la certeza de lo que no se ve

La fe nos permite tener certeza de lo que aún no se ha manifestado en nuestra realidad física. Es una convicción tranquila y segura de lo que Dios ha prometido.

La fe es creer firmemente en la promesas de Dios, incluso cuando todo a nuestro alrededor parece decir lo contrario.

Por ejemplo, podemos tener fe en que Dios nos va a proporcionar un empleo, incluso cuando estamos sin trabajo. O podemos tener fe en que Dios nos va a sanar de una enfermedad, incluso cuando los médicos nos dicen que no hay esperanza.

La fe es creer firmemente en lo que Dios ha dicho en su palabra, aunque no veamos ninguna evidencia de ello en nuestra realidad física. La certeza es la base de la fe. Debido a que en la fe no podemos ver físicamente las cosas, debemos estar seguros de que el resultado final está asegurado.

Dios no es un simple mortal para mentir y cambiar de parecer. ¿Acaso no cumple lo que promete ni lleva a cabo lo que dice? Números 23:19

La fe es un don de Dios

La fe es un regalo de Dios que se nos ha dado gratuitamente.

Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios Efesios 2:8

Cada uno de nosotros hemos recibido una medida de fe (Romanos 12:3), y es indispensable para creer en lo que Dios ha prometido.

Dios nos ha equipado con todo lo necesario para hacer de sus promesas una realidad en nuestras vidas. Ahora depende de nosotros lo que haremos con todos los recursos que se nos han dado.

Cómo funciona la fe

La fe funciona de una manera muy simple. A veces, la gente habla de la fe como si fuera una especie de energía mística o fuerza invisibles que hace que las cosas sucedan.

Pero la Biblia no enseña esto. En lugar de eso, vemos que la fe es algo mucho más personal y activo. La fe es simplemente creer en Dios y actuar de acuerdo a Sus promesas.

la fe por sí sola, si no tiene obras, está muerta. Santiago 2:17

Piensa en la fe como una herramienta. Un martillo no puede clavar un clavo por sí solo. Necesita de un operador para que lo maneje. De la misma forma, la fe necesita de nosotros para que funcione.

La fe es una herramienta que nos da Dios, pero necesitamos usarla para que podamos ver los resultados.

Háblale a tu montaña

La fe se demuestra cuando enfrentamos problemas o dificultades en nuestras vidas.

En Marcos 11:23, nos enseña que para mover un monte o una montaña (problemas, enfermedades, dificultades, etc.), debemos decirle en fe “Quítate de ahí y tírate al mar”, con certeza de lo que decimos.

Les aseguro que, si alguno le dice a este monte: “Quítate de ahí y tírate al mar”, creyendo, sin abrigar la menor duda de que lo que dice sucederá, lo obtendrá. Marcos 11:23

Como creyentes, debemos de ejercitar nuestra fe hablándole a las montañas de nuestra vida; Dios, por su parte, se encargará del resto.

En Mateo 17:20, Jesús le dice a sus discípulos que si tienen fe como un grano de mostaza, ellos podrán mover montañas.

Les aseguro que, si tuvieran fe tan pequeña como un grano de mostaza, podrían decirle a esta montaña: “Trasládate de aquí para allá”, y se trasladaría. Para ustedes nada sería imposible. Mateo 17:20

Decirles a tus problemas que se vayan no es algo mágico. Pero es una forma de mostrar tu fe en Dios y su palabra. Es decirle a tus problemas que, aunque pueden ser grandes y abrumadores, no son más grandes ni abrumadores que Dios.

La gente de fe como tú, no se rinde ante los problemas de la vida. En lugar de ello, enfrentan sus problemas y dificultades en fe, sabiendo que Dios es fiel y cumplirá lo que ha prometido.

Cómo podemos desarrollar una fe más fuerte

La fe es algo que se desarrolla a través de escuchar y escuchar la palabra de Dios.

Así que la fe viene como resultado de oír el mensaje, y el mensaje que se oye es la palabra de Cristo. Romanos 10:17

Por esta razón, tenemos que tener mucho cuidado con lo que escuchamos. Por ejemplo, si nos la pasamos escuchando mentiras, chismes o comentarios negativos, estaremos desarrollando fe en ellos y no en Dios.

Por el contrario, si buscamos a Dios y estudiamos su palabra, meditando en ella día y noche, nuestra fe se irá fortaleciendo.

Recita siempre el libro de la ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito. Josué 1:8

La fe es como un músculo, hay que ejercitarlo si queremos verlo crecer. Por ejemplo, si no ejercitamos un músculo, si nunca lo usamos, ese músculo se va a atrofiar y se volverá muy débil. De la misma manera, si no usamos nuestra fe, se volverá muy débil y no vamos a poder vencer las artimañas del diablo.

Conclusión

El significado de la fe es creer en Dios y actuar de acuerdo a Sus promesas, sabiendo que Él es fiel y que nos dará lo que necesitamos para vivir una vida en abundancia.

La fe es un don de Dios, y el primer paso para tener una fe más fuerte es escuchar la palabra de Dios. Luego, hay que poner en práctica lo que se aprende y actuar en ello, para que pueda crecer y fortalecerse.

Haz la decisión hoy de cultivar tu fe. Usa cada circunstancia adversa como una pesa, levántala y haz crecer tu músculo de fe. No te detengas hasta que hayas conquistado todas tus montañas. ¡Dios está contigo!

Espero que mi historia pueda inspirarte a vivir una vida apasionada y con propósito.
Lee más